TÁNGER
Tánger
(Tanga, طنچة
en bereber y arabe), es una ciudad del norte de
Marruecos situado en la costa oeste del estrecho de Gibraltar. Es la
capital de la región de Tánger-Tetúan.
Con una
superficie de 253,5 km2 y 700.000 hab, la ciudad limita al norte con
el estrecho de Gibraltar, al este y sur con la provincia de Tetuán y
al oeste con el océano atlántico.
1.-
BREVE RESEÑA HISTORICA
Según
cuenta la mitología bereber, Tánger fue construida por un hijo de
Tingis llamado Syfax, siendo Tingis la esposa del héroe bereber
Anteo. De hecho aún hoy, se puede visitar a 14 km al O. de Tánger
la llamada “Gruta de Hércules”, una de las mayores atracciones
turísticas regionales, donde se cuenta que durmió antes de la tarea
de cobrar manzanas del Jardin de las Hespérides.
Según lo
documentado realmente, conserva indicios de ocupación prehistórica,
y se constatan más tarde en ella algunos restos de presencia
fenicia, posiblemente debido a su excelente puerto. Hacia los años
40 a. C., es municipium romano, durante el reinado de
Calígula es dividido en dos Mauritania Caesariensio y Mauritania
Tingitana, ambas imperiales. Según la tradición, en el s.II d.
C. arraigó en ella el cristianismo, teniendo allí lugar el martirio
de San Marcelo ene l 298. Tingi fue conquistada por los Vándalos de
Genserico en el 429 d. C. Un siglo después entre 532 y 682, forma
parte del Imperio Bizancio, hasta que Muza, con el apoyo de las
tribus de Gomara, la pone bajo dominio árabe, e inicia desde allí
la conquista de la península ibérica.
Finalmente
en 1471 la ciudad es ocupada por las tropas de Alfonso V, y Don Juan,
hijo del duque de Braganza, quedando bajo el dominio de Portugal y
España hasta 1661. Posteriormente Tánger pasó a manos británicas
al regalarse como dote en la boda de Catalina de Braganza con el rey
Carlos II de Inglaterra. Será con la independencia de Marruecos, el
20 de octubre de 1956, cuando se inicia un proceso político que
culmina con el reconocimiento internacional de la adhesión de Tánger
a este país.
2.-
CULTURA
Enclave
multicultural de comunidades judías, musulmanas y cristianas,
Tánger ha atraído la atención de artitas como Paul Bowles, Jack
Kerouac, Tennessee Willians, Brion Gysin, y los Rolling Stone, todos
los cuales vieron o vistaron la ciudad. Después de Delacroix, Tánger
se convirtió en una parada obligada par los artistas que buscaban
los colores y la luz que aquel mostró. Como por ejemplo Fortuna,
autor rnre otras obras, de Zoco de Tánger que se conserva en la
Hispanic Society of América de Nueva Cork, o Mattisse que residió
varias veces en Tánger, siempre hospedándose en el Hotel Villa de
France. Todavía puede visitarse la habitación desde cuya ventana
pintó sus famosos paisajes, recordando su frase “encontré los
paisajes de Marruecos exactamente como los describe las pinturas de
Delacroix”.
El artista
californiano Richard Diebenkorn fue directamente influenciado por los
cautivadores colores y patrones rítmicos de las pinturas marroquíes
de Matisse. En la décadas de 1940 y1950, mientras la ciudad era una
zona internacional, sirvió como refugio para artistas, zona de
juerga para millonarios excéntricos, lugar de encuentro para agentes
secretos y todo tipo de timadores, una Meca para especuladores y
estafadores, El Dorado para los amantes de la buena vida.
3.-
LUGARES DE INTERES
Tánger
es también una ciudad turística. A ella llegan turistas desde todas
partes de Europa, especialmente desde Francia y España. Como lugares
de interés no debemos perdernos su Medina, el Gran Zoco, La Plaza de
Francia, La Gran Mezquita, el café Hafa y el Museo Dar El Mandoub;
en sus alrededores podemos ver lugares de sumo interés como Las
Grutas y el Cabo Espartel. Destacan también sus playas amplias y
vírgenes.
Como
lugares de interés no debemos perdernos su Medina, el Gran Zoco, La
Plaza de Francia, La Gran Mezquita, el café Hafa y el Museo Dar El
Mandoub; en sus alrededores podremos ver lugares de sumo interés
como Las Grutas y
Cabo
Espartel.
4.-
GASTRONOMIA
La cocina
marroquí es un asunto de mujeres y las recetas se transmiten de
madres a hijas desde hace miles de años. Sin embargo, el té es
cuestión de hombres. El arte de lam esa en Marruecos comienza con
una ensalada, las más simples (tomates, cebollas y pimientos) tienen
un sabor especial gracias a las especies. Otras especialidades son el
Tajine: pescado o carne roja y legumbres, es el plato nacional por
excelencia y se sirve en un gran recipiente de barro cocido del que
comen todos. El cuscus está especialidad de los viernes (día
festivo) luego de la oración del mediodía. A diferencia de otros
sitios del norte de África, en Tánger no se sirve demasiado picante
ni condimentado. Brochetas: es la comida de paso por excelencia,
pueden comerse en la calle y se sirven sobre pan. Los keftas:
albóndigas de carne molida muy especiadas. La harira: sopa
emblemática del Ramadan, a base de legumbres secas. La pastela:
pastel de masa de hojaldre, cebolla, carne de pollo o de paloma,
perejil, almendras, azúcar, canela y condimentos.
No
olvidemos, por otra parte, la riqueza del litoral marítimo de
Tánger, el pescado se sirve por doquier y es excelente: sardinas,
meros, merluza, calamares, mariscos, langostas, en pasteles,
albóndigas, asados, croquetas, pitas rellenas… toda una variedad
de exquisiteces.
5.-
COSTUMBRES
Aunque
adaptados a las costumbres occidentales, los marroquíes continúan
siendo conservadores en algunos aspectos. Además de tener en cuenta
aquellas relacionadas con los preceptos de la religión musulmana.
Costumbres a
tener en cuenta en Marruecos:
Al
saludar, la práctica común es dar 3 besos en las mejillas, pero
sólo entre personas del mismo sexo. El apretón de manos también
es habitual, seguido por la mano derecha sobre el corazón indica
respeto.
En una
conversación, es de buena educación preguntar por la familia y la
salud, pero se considere tabú cualquier mención a la familia real,
la religión, las drogas y los conflictos políticos (entre los más
tradicionales).
Los no
musulmanes no deben entrar a una mezquita sin solicitar
autorización, ni se pueden tomar fotografías del interior o a muy
corta distancia. Esta costumbre en Marruecos es seguida de forma
estricta.
Si
usted está en Marruecos durante la celebración del Ramadán, es un
gesto de amabilidad no comer, beber o fumar en público, aunque no
se pretende que se acompañe en el ayuno.
La
propina es una institución en Marruecos como en la mayoría de los
países árabes y es preferible no desatenderla. En todos los casos,
si no está seguro de la cantidad a dejar, puede optar por redondear
el total de la cuenta, pero nunca olvide dar propina.
Por ser
en su mayoría musulmanes, los marroquíes no beben alcohol, aunque
si es servido en algunos hoteles, bares y nightclubs. Nunca beba
alcohol en la vía pública.
Si va a
pedir indicaciones o ayuda a una persona desconocida, siempre
comience la frase con las palabreas Salaam Aleikoum, el
saludo tradicional marroquí.
Marina Vicente Patrón. 2ºBach.B